Sadomasoquismo. Nunca hasta ahora habíamos encontrado —y difícilmente lo hagamos en el futuro— un testimonio actual tan turbador y conmovedor a la vez como estas memorias de un ama célebre.
Annick Foucault no es otra que la propia Françoise Maîtresse, nombre bajo el cual se ha dado a conocer no sólo en París, donde ejerce, sino también en los ambientes «especializados» de toda Europa e incluso Estados Unidos. Dominadora en sus múltiples servicios, domina con igual destreza los servicios mediáticos, ya que emplea el Minitel para establecer sus contactos y el ordenador para sus encuentros con quienes exponen en vídeo sus propias particulares apetencias. MÁS INFORMACIÓN